
En Estados Unidos, se estima que existen 33,2 millones de pequeñas empresas. Para muchas de ellas, afrontar dificultades económicas, afrontar gastos inesperados o acceder a fondos suficientes para aprovechar oportunidades imprevistas no es fácil. Por ello, muchas recurren a líneas de crédito empresariales para mejorar su flujo de caja, lo que les proporciona un recurso al que pueden recurrir según lo necesiten.
Sin embargo, las líneas de crédito comerciales pueden resultar difíciles de gestionar si no se utilizan adecuadamente. Aquí tienes algunos consejos para gestionar tu línea de crédito comercial eficazmente.
Tenga un plan para los fondos
Como con cualquier financiamiento, es fundamental tener un plan para los fondos. Esto le permite actuar de forma proactiva y estratégica, asegurándose de no utilizar la línea de crédito disponible con más frecuencia de la prudente. Tenga claro en qué quiere y en qué no quiere usar el dinero, y tenga un plan de pago antes de usar los fondos. Esto le garantiza tomarse el tiempo para tomar decisiones inteligentes, evitando así futuros problemas financieros.