El Reino Unido reconoce el contrato de arrendamiento como una declaración legal y vinculante entre el inquilino que desea alquilar a un propietario y el propietario para que este reciba una compensación económica del inquilino. Esta guía destaca los términos y factores esenciales que deben completarse en un contrato de arrendamiento en blanco en el Reino Unido.
Aspectos a tener en cuenta para un contrato de alquiler en blanco
Si bien algunos contratos de alquiler contienen más términos que otros, aquí están los puntos esenciales a tener en cuenta al crear un formulario de contrato de alquiler en blanco.
- Duración del alquiler : Los contratos de alquiler pueden incluir alquileres a largo plazo o a corto plazo, como por ejemplo semanales o bimensuales.
- Nombre del inquilino : El propietario tiene derecho a saber exactamente quién quiere alquilar la propiedad y si esa persona existe legalmente.
- Información de contacto del arrendador : Asimismo, el posible inquilino tiene derecho a saber quién es el arrendador y cómo contactarlo. Esta información también es importante para el envío del pago acordado.
- Precio del alquiler : Ambas partes acuerdan el importe exacto del alquiler y su fecha de vencimiento. Si existen penalizaciones por demora en el pago, esto debe constar en el contrato de arrendamiento en blanco.
- ¿Quién es responsable de los servicios públicos ? Independientemente de si los servicios públicos son responsabilidad del inquilino o del propietario, este punto principal debe explicarse en detalle en un contrato de alquiler en blanco.
- Aumentos de alquiler : Cada zona aborda el aumento del coste de la vida de forma diferente. Es importante acordar cualquier aumento de alquiler antes de firmar el contrato de arrendamiento. El propietario y el inquilino también deben acordar los términos del aumento de alquiler con antelación.
- Terminación del contrato de alquiler : Los inquilinos tienen derecho a reclamar sus derechos de alquiler frente a desalojos ilegales, y los propietarios tienen derecho a proteger su propiedad privada y a obtener ingresos de ella. Los términos de la terminación del contrato de alquiler deben constar en un contrato de arrendamiento en blanco. También debe incluir otros factores permitidos que rescindan el contrato o arrendamiento.
Otros aspectos a considerar al redactar un contrato de arrendamiento en blanco son si la propiedad incluye muebles. También es importante el monto del anticipo que debe pagar el futuro inquilino.
Por último, los contratos de arrendamiento en blanco pueden incluir derechos sucesorios. Si el inquilino legal fallece antes de la finalización del contrato, el Reino Unido permite que el cónyuge, la pareja de hecho o un compañero de piso acordado que conviviera con el inquilino regulado antes de su fallecimiento asuman el contrato.
Tipos de contratos de arrendamiento en blanco
Los posibles inquilinos y propietarios que buscan alquilar una propiedad privada pueden firmar un contrato de alquiler en blanco para alquileres garantizados, regulados, excluidos y periódicos.
Un contrato de arrendamiento asegurado
Este popular tipo de contrato otorga al inquilino derechos estables de arrendamiento durante un largo periodo, lo que proporciona mayor protección contra el desalojo. Las propiedades privadas que son residencias universitarias, locales comerciales o que generan una renta superior a 100.000 libras anuales no son elegibles para contratos de arrendamiento con garantía.
Un contrato de arrendamiento regulado
Una de las principales ventajas de redactar un contrato de arrendamiento en blanco para un arrendamiento regulado es la protección adicional contra los desahucios. Gracias a la Ley de Vivienda del Reino Unido de 1988, los contratos de alquiler firmados antes del 15 de enero de 1989 se consideran arrendamientos regulados. Los inquilinos que se acojan a este contrato pueden solicitar una renta justa.
Contratos de arrendamiento excluidos
Si vive en su propiedad privada, puede alquilarla total o parcialmente bajo un contrato de arrendamiento excluido. Sin embargo, este tipo de contrato no ofrece al inquilino todas las protecciones contra el desalojo que ofrecen otros contratos de arrendamiento.
Contratos de arrendamiento verbales
El gobierno del Reino Unido reconoce los acuerdos verbales entre el posible inquilino y el arrendador, especialmente si se llegó a un acuerdo verbal sobre la duración, el importe y las condiciones del alquiler. Sin embargo, si surge una disputa sobre un acuerdo verbal al redactar un contrato de arrendamiento en blanco, los correos electrónicos o mensajes de texto entre el posible inquilino y el inquilino podrían servir como prueba.
Contratos de arrendamiento introductorios
Los contratos de arrendamiento introductorio suelen tener una duración de 12 meses para demostrar al arrendador la fiabilidad a largo plazo del inquilino en el cumplimiento de las condiciones del contrato. Con este tipo de contrato, los arrendadores no tienen que demostrar ante un tribunal las causas de desalojo. A continuación, se presentan algunas razones comunes para descalificar a un inquilino de un contrato de arrendamiento a largo plazo.
- No pagar el alquiler o atrasarse crónicamente en el pago
- Causar destrucción o vandalizar la propiedad
- Realizar un negocio ilegal en las instalaciones o participar en una actividad ilegal
Por otro lado, si el inquilino cumple con los términos del contrato de alquiler introductorio durante su duración, automáticamente pasa a una forma de alquiler seguro.
Contratos de arrendamiento seguros
Salvo actividad ilegal en la propiedad, la mayoría de los inquilinos que operan bajo un contrato de arrendamiento seguro pueden disfrutar de su vida normal en ella. Además, quienes utilicen este contrato durante al menos tres años pueden optar a comprar la propiedad mediante un plan de "derecho a compra".
Modificación de un contrato de arrendamiento
Al redactar un contrato de arrendamiento en blanco, es importante tener en cuenta las condiciones de modificación. Si no existe tal modificación, el inquilino y el arrendador pueden acordar cualquier modificación o nuevos términos de alquiler.
Tanto el inquilino como el propietario pueden solicitar un contrato de alquiler actualizado o uno completamente nuevo, especialmente por cualquier cambio de alquiler, herencia o sucesión, compañeros de habitación adicionales o si el inquilino busca transferir el trato a otro miembro de la familia o una pareja de unión civil.
Si bien los cambios se pueden acordar verbalmente, ambas partes deben aceptar un nuevo contrato de alquiler o una actualización aprobada del existente.